Adiós muchachos compañeros de mi vida,
barra querida de aquellos tiempos.
Me toca hoy a mi emprender la retirada,
debo alejarme de mi buena muchachada.
Carlos Gardel
Efectivamente
como Carlos Gardel hoy debo emprender la retirada. Lo anuncié hace ocho años y
es hora y momento de cumplir un deseo y un compromiso que nace de lo más
profundo de mis convicciones. Esto es, con el límite de ocho años de gestión al
frente de la Delegación Provincial de Empleo de la Junta de Andalucía volver a
mi actividad profesional como funcionario del Ayuntamiento de Cádiz. Hoy es
viernes 23 de Marzo y estamos en el último día de la campaña electoral de las
elecciones autonómicas de Andalucía y por tanto, y así lo creo, estando abierta
todas las posibilidades en el escrutinio del domingo por la noche, no peco de
oportunista puesto que fue algo que anuncié hace ocho años y que he venido
reiterando a quien me ha preguntado a lo largo de todo este tiempo. Gane quien
gane las elecciones, gobierne quien gobierne esta próxima legislatura, mi decisión
está basada en un convencimiento personal: ocho años son suficientes para un
cargo de responsabilidad para el cual no has sido elegido sino nombrado. Es mi
posición y punto. No quiero con esto desmerecer a otras personas, políticos que
no estén de acuerdo, sean del Partido que sean, pero también quisiera que se
abordase mi decisión desde la normalidad que para mi la tiene. A partir del
lunes estaré en funciones y a disposición de la persona o personas que vayan a
desarrollar estas responsabilidades con el próximo gobierno (me gustaría, claro está,
que fueran de mi Partido, pero no cambiará mi disposición si no es así).
Han
sido ocho años de una intensidad inusitada, ¡que les voy a contar! Nunca pensé
que esto fuera a ser fácil, ni siquiera pensé que iba a ser lo gratificante que
algunos creen que puede ser la gestión política (eso de la erótica del poder),
pero lo que tampoco pensé es que definitivamente esta etapa me marcará para
siempre…Me imagino que muchos que lean esto pensaran que soy un exagerado, que
hay políticos, miles, de Presidentes de Gobierno para abajo, que pasan por
experiencias tremendas, en lo positivo y en lo negativo y que no hay que darle
más importancia que la de una experiencia más. Es verdad, pero el que está
escribiendo este texto soy yo, Juan Bouza, y lo que yo haya sentido, lo que
siento es propiedad mia, mi emociones me pertenecen y como dice un amigo mío “no
puedo dejar de pensar que mis problemas son los más grandes del mundo y mis alegrías
las mejores".
Mi
experiencia ha sido brutal en todos los sentidos, así lo he vivido yo, y así lo
expreso. No se si quedan cosas del Juan Bouza timorato e inseguro del mes de
mayo de 2004, pero desde luego, es mi vivencia y así lo digo. He ganado en
todo, y por eso me encuentro que he crecido personalmente (está feo decirlo pero creo
que soy mejor persona ahora), he crecido profesionalmente, y eso porque he
estado rodeado de magníficos profesionales en la Delegación de los que he
aprendido y con los que he compartido la mayoría de las situaciones.
He
hecho muchos amigos (y claro supongo que muchos enemigos) de ámbitos tan
dispares como puedan ser trabajadores, sindicalistas, empresarios, políticos de
otros partidos, ONG`s, periodistas, personas a las que admiro porque tienen un
denominador común: su trabajo permanente en bien de la ciudadanía y el cariño a
nuestra tierra, y aunque desde posiciones muy distintas me han también
demostrado su complicidad, su cariño y su respeto.
Me
voy satisfecho de lo que hice aunque me da pudor el valorarlo. Me voy con esa
maleta llena de recuerdos trufados de sinsabores, sufrimientos pero también de
alegrías y buen humor. Incluso con las cuestiones alejadas de la actividad política
que me han marcado este tiempo que indefectiblemente se mezclan en un todo
impreciso pero intenso.
Gracias
a todos. Gracias a los medios de comunicación por su comprensión y por el trato
que me han dado que no es ni más ni menos que el “darme leña” cuando lo
consideraban pero siempre desde el respeto y porque no decirlo desde una relación
cordial.
Gracias
a los funcionarios y personal laboral de la Delegación porque me han hecho la vida
más fácil y porque han sabido disculparme mis errores, mis incompetencias y me lo
han devuelto con cariño y un alto sentido de la responsabilidad y de lealtad
institucional.
Gracias
a los trabajadores, sindicalistas, a los empresarios y sus representantes
porque con la complicidad de ellos hemos conseguido que a pesar de esta maldita
crisis hemos sabido consensuar situaciones y soluciones desde el
respeto y de manera creciente desde la empatía y la buena relación.
Gracias
a los políticos de otras formaciones, porque cada uno
desde sus ideas y posiciones creo que hemos mantenido una relación de respeto
que casi siempre ha hecho posible que se minimizaran los problemas derivados de
las distintas sensibilidades políticas.
Gracias
a mi Partido, al PSOE, por haber confiado todo este tiempo en mí para esta
responsabilidad. Espero no haberles defraudado, como se suele decir lo he dado
todo, me he exprimido para devolver esa confianza.
Y
gracias a mi familia, el sostén de mi vida.
1 comentario:
Y pasas página satisfecho de lo que has escrito y a seguir escribiendo nuevas líneas para tu vida. Gracias por la coherencia que te mueve y felicidades por la etapa vivida. Un abrazo.
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